CAlahorra en un fin de semana
Sábado por la mañana
Comienza tu visita en la Oficina de Turismo, situada en la Plaza del Raso, donde recibirás información actualizada y recomendaciones para tu fin de semana.
Frente a la plaza se encuentra la Iglesia de Santiago, dedicada al apóstol, que refleja la tradición jacobea de la ciudad. Desde aquí, toma la calle Ángel Oliván para llegar al Museo de la Romanización, donde podrás conocer cómo vivían los antiguos calagurritanos a través de sus restos arqueológicos y objetos cotidianos.
Regresa a la plaza del Raso y adéntrate por la calle Mayor y la Cuesta de la Catedral hasta llegar a la Catedral de Santa María. Los sábados puedes participar en una visita guiada a las 12 h, que incluye la Sacristía y el Museo Diocesano, ubicado en el claustro plateresco de la catedral. Si visitas por tu cuenta, no olvides admirar la pila bautismal, la capilla de los Santos Mártires y preguntar por la leyenda del Cristo de la Pelota.
Cuando llegue la hora de comer, puedes volver al centro subiendo por la calle Mediavilla o pasear tranquilamente por el Parque del Cidacos hasta llegar a la zona del Ayuntamiento, donde bien subiendo hacia la calle Grande o bien en el paseo del Mercadal te esperan numerosos restaurantes para saborear la cocina local.
Sábado por la tarde
Reingresa al casco histórico por la calle Eras, desde donde tendrás una panorámica del yacimiento de ‘La Clínica’, el más importante de la ciudad romana. Así como información del conjunto termal encontrado en la misma calle e incluso vestigios de la Muralla en la calle Juan Ramos. En tu paseo, descubrirás una antigua chimenea industrial, testigo del auge fabril que tuvo Calahorra entre los siglos XIX y XX.
Antes de adentrarnos en la calle Bellavista y en la calle Portillo podemos observar el Torreón. Una vez lo hayas visto, avanza hasta la calle Bellavista, atravesando el arco romano del Planillo, puerta histórica que conectaba Calahorra con Caesaraugusta (Zaragoza). A continuación, visita la Iglesia de San Andrés, cuyo sobrio exterior contrasta con un interior decorado con estilo rococó.
Baja por la calle Cuesta de las Monjas para llegar al Convento de San José, donde podrás comprar dulces tradicionales y visitar su iglesia barroca, destacando la imagen del Cristo atado de la Columna, de Gregorio Fernández. Desde allí, un paseo por el Parque del Cidacos te llevará al Santuario del Carmen, lugar de gran devoción en Calahorra, y al histórico Crucifijo o Humilladero, punto de acogida para peregrinos desde el siglo XVI.
Para regresar, recorre el camino del Carmen hasta la calle Mediavilla, pasando por la Fuente de los Trece Caños, el antiguo lavadero y frente a la Catedral antes de llegar al centro de la ciudad para descansar.
Sábado por la noche
Cuando cae la noche, Calahorra se llena de vida en zonas como la Plaza Philips y el Paseo del Mercadal, donde encontrarás numerosas terrazas y locales ideales para tomar una copa y disfrutar del ambiente nocturno.
Para cenar, las calles Mártires, Grande y la Plaza del Raso ofrecen una buena variedad de restaurantes con cocina local y pinchos, perfectos para descubrir los verdaderos sabores calagurritanos.
Si prefieres un plan cultural puedes asistir a una función en el Teatro Ideal o disfrutar de la cartelera de cine, opciones que suelen ofrecerse durante los fines de semana.
Finaliza la velada con un paseo relajado por la Era Alta o la avenida Valvanera bañadas por la luz nocturna.
Domingo por la mañana
Inicia el domingo con un recorrido por la antigua ciudad medieval, explorando el barrio de la Judería y disfrutando del legado urbano que ha llegado hasta hoy.
Desde la Plaza del Raso, pasea por las calles Santiago, Cuatro Esquinas, La Estrella y San Andrés hasta llegar al Rasillo de San Francisco. A lo largo del camino, descubrirás murales y obras de arte contemporáneo elaboradas por jóvenes artistas locales.
En el Rasillo de San Francisco, podrás acercarte al mirador y posteriormente visitar la Iglesia de San Francisco, donde se expone la muestra de los Pasos de la Semana Santa Calagurritana, declarada de “Fiesta de Interés Turístico Nacional”, junto al simbólico Monte Sacro.
Continúa por la calle San Sebastián hasta la calle Murallas para observar el antiguo torreón y restos de murallas conocido como El Sequeral, que datan del siglo I.
Luego, desciende por las escalerillas hacia la calle Cuesta de la Catedral hasta llegar al Museo de la Verdura, dedicado a la huerta y la industria conservera calagurritana.
Desde allí, sube a la Plaza de la Verdura, un mirador desde el que podrás contemplar la cuenca del río Cidacos, la huerta y, en días despejados, el Moncayo te espera.
Domingo por la tarde
Dedica la tarde a pasear por los comercios locales y disfrutar de la variada oferta gastronómica del centro. Camina por las calles Mártires y Grande para admirar sus edificios singulares de principios del siglo XX.
Cuando llegues al Paseo del Mercadal , aprovecha para fijarte en los monumentos y esculturas que narran la historia de Calahorra mientras cierras tu fin de semana en la ciudad.
¿Quieres más?
Si decides prolongar tu estancia, Calahorra te invita a conocer sus alrededores con rutas naturales como La Degollada, perfecta para senderismo y contacto con la naturaleza.
También puedes visitar alguna bodega (incluido en Enoturismo: Bodegas de ‘Rioja Oriental’), vivir una experiencia familiar en el Parque temático de aves rapaces ‘Tierra Rapaz’ o consultar la agenda cultural para descubrir exposiciones, mercadillos y eventos locales.